Con el paso de los años se va perdiendo fuerza y agilidad, ya no se tiene los mismos reflejos y esto comienza a limitarnos y a mermar nuestra calidad de vida. A edades avanzadas son recurrentes los problemas articulares, neurológicos, entre otras muchas patologías que nos afectan con el paso de los años, es por ello que es importante realizar los ejercicios y las actividades físicas necesarias según nuestro cuerpo y nuestras necesidades para mantenernos lo mejor posible.
Asimismo, las terapias de rehabilitación muy necesarias en caso de caídas y roturas de algún hueso son problemas muy comunes en la vejez. Nadie está preparado para saber cómo tenemos que comportarnos en estos momentos y es por ello que es tan importante contar con el apoyo técnico y médico necesario.
Nuestra sala de fisioterapia cuenta con los equipos más novedosos en la fisioterapia geriátrica, así como infrarrojos, poleas y demás instrumentos necesarios para realizar todas y cada una de las terapias y actividades que necesite el residente, siempre controladas e impartidas por un fisioterapeuta especializado en atención geriátrica. Buscando no sólo retrasar lo máximo posible el deterioro físico de nuestros mayores sino intentar mejorar todo lo posible el mismo para conseguir con ello que su calidad de vida sea aun mejor.